miércoles, 27 de octubre de 2021
miércoles, 29 de septiembre de 2021
CESTO DE LOS TESOROS
Un cesto de tesoros es una interesante propuesta de juego para bebés que consiste en una caja o cesta donde se meten objetos de diferentes materiales y texturas.
La idea principal es que los pequeños no utilicen los típicos juguetes infantiles, sino elementos de uso cotidiano que solemos tener en nuestros hogares. También se pueden incluir productos de la naturaleza.
Se puede afirmar que el cesto de los tesoros pertenece al denominado juego heurístico, es decir, es un tipo de actividad que estimula el descubrimiento y la experimentación con distintos materiales durante la primera infancia.
Esta actividad educativa es fantástica para que los bebés experimenten con ellos y descubran sus formas, texturas, colores, olor…
Un cesto de tesoros tiene muchos beneficios para los chiquitines de la casa porque:
- Sirve para que aprendan a jugar por su cuenta.
- Favorece que exploren e investiguen a su ritmo, eligiendo los objetos en el orden que les apetece y parándose a observar con detenimiento aquellos que más les atraen.
- Supone para ellos una gran estimulación sensorial porque utilizan los cinco sentidos: oído, tacto, olfato, vista y gusto.
- Estimula la coordinación motora, la coordinación óculo- manual, la motricidad gruesa y, muy especialmente, la motricidad fina.
- Permite a los bebés descubrir distintos pesos, volúmenes, durezas y comportamientos de los distintos elementos (unos ruedan, otros pierden su forma original si se aprietan…).
- Desarrolla la atención y la concentración.
- Facilita el uso de objetos muy distintos a la vez, algo que les hará pensar de qué forma se pueden relacionar (meter uno dentro de otro, etc.).
Además, es muy interesante tener en cuenta que:
- A medida que los bebés van adquiriendo autonomía se desplazarán más libremente por la habitación. Esto es, ampliarán su espacio de acción y descubrirán en los objetos nuevas funciones.
- Es importante cambiar o añadir de vez en cuando algún objeto. ¡Es probable que lo vivan como una sorpresa de lo más emocionante!
- Cuando acabe la sesión de juego pueden guardar todo de nuevo alentados por el adulto. Esto fomentará la responsabilidad, el sentido de orden y la medida de tiempos (acaba una actividad que da paso a otra).
¿Cómo debe ser el cesto de los tesoros?
La cesta o caja que uses debe ser muy segura. Ten en cuenta que va a estar al alcance del bebé y hay que evitar cualquier situación peligrosa. Así pues, asegúrate de que:
- No tenga esquinas peligrosas.
- Esté fabricada con un material seguro. Comprueba que no haya partes que se puedan arrancar o despegar con relativa facilidad.
- Sea ligera, suave, blanda… Es fundamental que, si se vuelca o cae sobre el bebé, no le haga daño.
- Tenga un tamaño accesible para el bebé. Si aún no se sienta tiene que tener muy poquita altura para que pueda coger las cosas tumbado. Obviamente, puedes adaptar o cambiar la caja a medida que pase el tiempo.
¿Qué tipo de objetos podemos introducir en un cesto de tesoros?
¡Hay muchos que puedes utilizar! Echa un vistazo a todo lo que tienes por la casa y escoge los que te parezcan más adecuados. Por supuesto, lo principal es que:
- Su tamaño sea lo suficientemente grande para no se los pueda tragar o introducir por algún orificio (nariz, orejas…).
- No tengan esquinas o bordes afilados con los que se pueda lastimar.
- Sean resistentes, es decir, que no se puedan partir de un pequeño golpe o lanzamiento. Evita también aquellos que poseen piezas que se pueden desprender.
- No estén cubiertos de pinturas tóxicas o puedan producir algún tipo de reacción alérgica en piel, ojos…
RECOMENDACIONES IMPORTANTES
- El cesto de juguetes está pensado para que el niño juegue y explore por su cuenta y sin que nadie le interrumpa en un lugar tranquilo, pero EN TODO MOMENTO DEBE ESTAR VIGILADO POR UN ADULTO.
- Si dudas a la hora de elegir un objeto porque no lo acabas de ver claro, no te la juegues y descártalo.
- Los objetos rodarán por el suelo, se llenarán de babas, se mancharán con mocos, los tocarán otros miembros de la familia, serán atractivos para tu perro o gato… Limpia y lava todo a menudo porque hay que ser extremadamente cuidadosos con la higiene.
TABLERO SENSORIAL DE OTOÑO
domingo, 5 de septiembre de 2021
VUELTA AL COLE CON EL MONSTRUO DE COLORES
Septiembre siempre es el comienzo de algo.
¿Estáis preparad@s?
¡Allá vamos Septiembre!
domingo, 22 de agosto de 2021
VUELTA AL COLEGIO. QUE NO SE CONVIERTA EN UNA PESADILLA.
Se acaban las vacaciones y toca volver a la rutina y la normalidad. ¡Qué aburrimiento!
Lo más importante es enfrentarnos al regreso a las clases con motivación, ilusión y nuevos propósitos. ¡El inicio del curso tiene mucho que ofrecernos!
Consejos para disfrutar de la vuelta al colegio de los niños
Hábitos de sueño y más rutinas para el inicio del curso
Antes de que empiece el curso es momento de empezar a establecer las rutinas que hemos ido perdiendo en vacaciones. Nos referimos, por ejemplo, a retomar las rutinas de sueño (acostarse pronto y madrugar).
Estas buenas rutinas para dormir deben ponerse en marcha unos días antes de la vuelta al colegio. Hay padres que prefieren hacerlo de una forma progresiva y, así, que una semana antes los niños ya empiecen a acostarse cada vez un poco más pronto. Se trata de pasar por un proceso de adaptación de cara a la vuelta a la normalidad.
Los buenos hábitos también deben llegar hasta la alimentación, ya que es posible que durante los días libres hayamos sido más flexibles con lo que comemos. Es momento de volver a traer a casa los buenos hábitos alimenticios, ya que debemos asegurarnos de la dieta de nuestros hijos es variada y equilibrada. Recuerda que los niños (y los padres) necesitan comer mucha fruta y verdura para recibir todos los nutrientes para crecer sanos y fuertes.
Pero, además, con la vuelta al colegio también debemos dar a nuestros hijos las herramientas necesarias para que puedan ser autónomos. Estos hábitos de independencia los tenemos que trabajar con anterioridad y, sobre todo, con paciencia y empatía. Es posible que en algunos colegios nos pidan que los niños de 3 años vuelvan al colegio sin pañal.
Después de unas largas (y sanas) vacaciones y antes de empezar la escuela, no vendrá mal hacer una visita al pediatra. Esto dependerá mucho de la edad y las necesidades de los niños, pero podemos hacer una revisión rutinaria. Fíjate también en el calendario vacunal por si tu hijo o hija necesitara alguna de las vacunas recomendadas para su edad.
El estrés que suele venir aparejado a la vuelta al colegio puede tener consecuencias en la salud de los niños.
Y si hablamos de temas de salud y la vuelta al colegio, no podemos dejar de mencionar a los piojos, ¡porque ellos también vuelven a la escuela! Revisa la cabeza para asegurarte de que tu hijo no va con piojos al colegio, pues podría contagiar a otros niños. Déjate asesorar por especialistas o por tu farmacia de confianza.
Acompañar emocionalmente a los niños al ir a la escuela
La vuelta al colegio viene siempre acompañada por muchas emociones (muy diferentes) y un poco de estrés, tanto por parte de los padres como por parte de los niños. Porque sí, los padres también sufrimos con el regreso a las clases ya que no nos gusta ver partir a nuestros hijos, sobre todo cuando son pequeños y se enfrentan a las primeras veces (la primera vez en la escuela infantil, el primer día en el colegio, etc.). Sin embargo, admitámoslo: también es un alivio cuando los pequeños ya van al colegio, puesto que podemos organizarnos mejor.
Pero, por muy mal (o bien) que lo pasemos, debemos buscar esa fuerza interior para motivar a nuestros hijos en el inicio del curso. Nuestro objetivo tiene que ser que los pequeños vayan al colegio con una sonrisa en la cara, desde el primer día de clases.
Para ello, nos podemos valer de frases motivadoras como 'Confío en ti' o '¡Empieza una gran aventura!'. Pero también tenemos a nuestra disposición otras técnicas como la del estuche mágico, que los niños podrán usar como recurso cuando sientan miedo en clase.
Si tu hijo sufre de ansiedad por la vuelta al colegio, no dudes en hablar con sus maestros o, si es necesario, con un profesional que os pueda dar pautas para relajarle antes de empezar de nuevo las clases.